Es bien conocido entre los jugadores de ajedrez conocedores de los patrones y secuencias más básicas, que el jaque mate más corto que se puede dar en una partida es el mate del loco, no obstante este es un mate que dan las piezas negras ante una serie de jugadas bastante imprecisas del bando blanco.
El mate más corto que se puede dar con piezas blancas corresponde a una partida anecdótica de torneo en la cual el jugador de piezas negras, viendo que había una serie de movimientos clásicos del mate del pastor, pensó en mover su reina hasta f3, para que no le vieran la cara con una secuencia para ganarle a los novatos, no obstante, ante sus ganas de realizar la jugada rápidamente no movió la reina sino el rey, constituyendo una jugada ilegal que fue rápidamente advertida por el rival, dándose cuenta de su error, decidió remendarlo rápidamente moviendo ahora si a la reina, no obstante, nuevamente ante el reclamo de la regla "pieza tocada es pieza jugada", el jugador de negras no tuvo otra opción que jugar su rey a e7 en una jugada que le sentenciaría la partida, pues el blanco contestaría con Dxe5# cayendo el rey en una de las múltiples posibilidades del llamado mate de las charreteras o de las hombreras, en el cual sus propias piezas le impiden poder escapar.